La Sociedad Rural del Valle de Uco, a través de su presidente Mario Leiva se reunió el 27 de octubre con ASOCAMEN en las instalaciones del IDR para discutir el precio de referencia del ajo para la presente campaña.
En este sentido, Leiva señaló que “desde la producción primaria sabemos que en el contexto económico actual no es fácil determinar un precio dado que el ajo de exportación se comercializa a valor dólar. Nuestra posición fue dada por el análisis no solo de los costos operativos sino también económicos y es de 60 centavos de dólar oficial en verde. ASOCAMEN se negó a aceptar este precio de referencia, pero tampoco estableció algún precio, según ellos deberíamos entregar la mercadería y esperar que nos digan cuanto tendríamos que ganar”.
Y continuó: “Vamos a poner las cosas blanco sobre negro, la ASOCAMEN que aglutina a los empacadores exportadores se resiste a la Ley 9.133 y su modificatoria que establece estas mesas de trabajo para acordar un precio. Como productores consideramos que es una herramienta necesaria para que esta actividad sea sustentable y que se establezca una relación justa tanto para el productor como la industria. Esta ley es muy resistida no solo por los empacadores de ajo sino por los bodegueros y los empacadores de fruta por que durante mucho tiempo se ha naturalizado el concepto de “tráeme la mercadería y después vemos cuanto y como te la pago”, esta forma de establecer una relación comercial dio como resultado que muchos productores primarios abandonaran su actividad y que muchos empacadores crecieran en producción y en volúmenes exportables a costa de esos productores”.
En esta línea, el dirigente remarcó que “también es cierto que muchos productores necesitan del financiamiento de estos empacadores y se realizó una integración en forma horizontal que aumentó la dependencia cada vez mayor con la que concentra el negocio y esto se refleja en que nunca se habla de precio. Todo tiene que ver con todo, el populismo y la concentración económica son la consecuencia de lo mismo, la falta de un Estado que proteja al más débil y si bien la Ley 9.133 es un principio se tendría que aplicar el Código de Comercio Argentino en su articulado 10,11 y 12 obliga a las partes a ponerse de acuerdo y de lo contrario se dirimen las diferencias en una Cámara Arbitral”.
Ante esta situación, el dirigente resaltó que “el exportador no tiene la culpa que en este país existan varios dólares, una inflación incontrolable, que las leyes laborales no estén adecuadas a nuestra actividad, menos culpa tiene el productor que gasta e invierte todos los años y entrega una mercadería sin precio. La ineficiencia esta del lado de la industria no del productor. Si no pueden transparentar un precio y quieren seguir concentrando el negocio no solo van a terminar con el productor, sino que van a quedarse sin mercado”.
Por último, Mario Leiva remarcó que “exigimos 60 centavos de dólar de piso para cualquier variedad en verde para poder sembrar el año que viene y participe mas en la mesa de trabajo sectoriales que a nosotros nos sirve, y si no tenemos resultado pediremos al poder Ejecutivo que aplique el Código Civil y Comercial de la Nación, en su Ley 26.994. Necesitamos seguir trabajando por una Argentina en donde se pueda producir en paz sin que le roben el esfuerzo al que trabaja”.